Sanidad es uno de los sectores que superan la media de días ausente por contingencia común

El 81% de las propuestas de alta de las Mutuas fueron aceptadas por los Servicios Públicos de Salud en 2016.

La Medicina del Trabajo no está suficientemente valorada en los planes de formación de las facultades, y su situación se complica por encontrarse equidistante entre las carteras de Sanidad y Empleo. Esa es una de las principales conclusiones del informe Adecco sobre el absentismo laboral, que aboga además por la vigilancia y promoción de la salud del trabajador como mecanismo de reducción de las ausencias.

El déficit progresivo de los especialistas en Medicina del Trabajo se debe, según los expertos, a dos factores clave, que son las restricciones en las plazas MIR disponibles y el desconocimiento de esta especialidad por parte de los futuros médicos. «La falta de interés se ha manifestado con elecciones de las plazas en los últimos puestos del MIR y la propia ausencia de contenido de referencia durante la formación universitaria. La vigilancia de la salud, la labor del médico del trabajo, las competencias profesionales en sanidad pública, privada y de la empresa han sido un déficit constante en los últimos años dentro de las facultades de Medicina», resaltan.

Según el informe, las actividades sanitarias están entre las que superan en una contingencia común la media de días ausentes por cada 100 trabajadores, tanto en el grupo de entre 35 y 49 años como en el de más de 49 años.

Una de las principales opciones que manejan los expertos es que las Mutuas «tuvieran la posibilidad de prestar asistencia sanitaria, simplemente con el consentimiento del trabajador, sin necesidad de la autorización del Servicio Público de Salud, y dar el alta en los procesos de incapacidad temporal por contingencias comunes, al menos en las patologías traumatológicas». Con esta medida «y sin menoscabo de los derechos de los trabajadores, se podría obtener un ahorro directo e inmediato de más de 1.100 millones de euros anuales para el Sistema de Seguridad Social, y para las empresas, lo que sin duda terminaría revirtiendo en beneficio de los trabajadores».

Estas propuestas, al menos en procesos de patologías traumatológicas, ayudarían a la racionalización del gasto y a suprimir los costes innecesarios, económicos y sociales que se producen, según el informe. La actuación sanitaria de las Mutuas en las bajas por enfermedades y accidentes no laborales lleva asociada, en opinión de los expertos, una mejor y más pronta recuperación de los trabajadores y una reducción de las listas de espera de los Servicios Públicos de Salud.

El citado buen hacer de los profesionales de las Mutuas lo refrendan con que de las propuestas de alta que presentan a los Servicios Públicos de Salud en los procesos de baja por contingencias comunes, en 2016 más del 81 por ciento fueron aceptadas.

Entre Empleo y Sanidad

Uno de los problemas que relata el informe es la situación equidistante de la Medicina del Trabajo ente las consejerías de Empleo y Sanidad, lo que motiva que ninguna de ellas suela tomar las riendas en las medidas a implementar. «El futuro de la Medicina del Trabajo es demandado por las empresas y se augura brillante, pero contando con la barrera de la disponibilidad de profesionales, la colaboración con la sanidad pública y los médicos de Familia se hace necesaria y acuciante para poder dar los resultados óptimos con los recursos disponibles», recogen desde Adecco.

Entre las medidas barajadas en materia de asistencia sanitaria está reconocer a las Mutuas para que puedan asumir la gestión sanitaria de incapacidad temporal por contingencias derivadas de patologías traumatológicas y que pudieran dar asistencia a los pacientes sin baja en contingencias comunes, máxime si han sido intervenidos quirúrgicamente en la Mutua.

Respecto a la gestión administrativa, se pide reconocer a los facultativos de las Mutuas la opción de acceso a la totalidad de la historia clínica con la autorización del trabajador o la de otorgar eficacia positiva al silencio administrativo del Servicio Público de Salud y de la entidad Gestora frente a las propuestas de alta motivadas que realicen las mutuas.

Todo lo anterior va encaminado a las tres propuestas de solución del absentismo que enumera Adecco, que incluyen modificar el paradigma de prevenir los riesgos laborales a promocionar la salud total del trabajador -para lo que es necesario conectar los sitemas de recogida de información de Empleo y Sanidad-, dotar a los médicos del Trabajo de herramientas que les faciliten su coordinación con el resto de profesionales, especialmente con los médicos de Familia, y aumentar el número de plazas MIR para especialistas en Medicina del Trabajo.

FUENTE: redaccionmedica.com